Claves para entender a los Maestros

17 mayo 2016

Escudos de los 33 grados del R.·.E.·.A.·.A.·. 1º al 3º


I.              Escudos de los 33 grados del R.·.E.·.A.·.A.·.



            1º Aprendiz
En francés se dice apprenti; en inglés apprentice; en italiano apprendente; en alemán lehrling. En todos los casos el significado es: alguien que aprende.

«Es equivalente a los pequeños Misterios de las Iniciaciones antiguas, y en la Masonería es el grado preliminar, designado para preparar al candidato para los grados más altos y para las instrucciones de los grados subsecuentes» (Mackey).


Veamos algunos elementos que aparecen en el escudo.
La escuadra
         Corresponde a la letra hebrea daleth.
         La escuadra, como símbolo, está presente en los tres grados, pero su significado se va modificando progresivamente.
         Para el Aprendiz es un símbolo de Orden (cuadrarse), para el Compañero un instrumento de verificación de la rectitud de la piedra, para el Maestro es la joya del presidente de la Logia.
         Desde un punto de vista exotérico, la escuadra simboliza «la rectitud y la precisión que los masones se esfuerzan por sostener en sus pensamientos, palabras y acciones» (Gran Oriente de Francia, Ritual de Adopción, 2002).
         Según Mackey, la escuadra masónica debería ser de brazos desiguales; sin embargo, en muchos casos ambos brazos se representan con igual longitud.
Con la escuadra se trazan la cruz, el cuadrado y otras figuras que remiten a los cuatro puntos cardinales, las cuatro estaciones, los cuatro «elementos» de los antiguos, etc.; por lo que se la relaciona con lo terrestre: es la «ciencia de la tierra».

El compás
         Exotéricamente, el compás es el símbolo de «la mesura, la lógica y la sabiduría que deben dirigir las acciones de todos los masones» (Gran Oriente de Francia, Ritual de Adopción, 2002).
         O bien, de que debemos «mensurar todas las cosas en su justo valor».
         Pero, esotéricamente, el compás es el instrumento que traza el círculo mágico, que aísla al Iniciado, el operador, de las influencias externas.
         En el Aprendiz, el compás se abre a 45°; en el Compañero, a 60°; y en el Maestro, a 90°.

La cuerda con nudos
         Como ya dijimos, el Templo está rodeado completamente por una cuerda anudada, que se inicia sobre el trono del Venerable y termina en dos extremos libres (la houppe dentelée de los masones franceses, algo así como borlas con flecos),  ubicados sobre las columnas Jakim y Boaz. 
         Los nudos de la cuerda son conocidos como los “lazos de amor” y corresponden al símbolo matemático del infinito.

CUADRO
         Los Cuadros de Dibujos han sido siempre característicos de las Logias inglesas o
norteamericanas, pero también podemos encontrar Cuadros de Logias francesas o de otros países.
         En inglés, cada Cuadro se denomina “Tracing-Board”, o bien «Trestle-Board».
         Algunas tradiciones afirman que todos los Aprendices, en las Logias Operativas, debían trazar en el suelo, con tiza, los símbolos de su grado.
         Notemos además que el Cuadro presenta una gran analogía con el Templo, pues ambos consisten en una integración armónica de los símbolos del grado.
         Posteriormente, en Inglaterra los diseños se copiaron en alfombras o tapices, y progresivamente la costumbre de dibujar y borrar los Cuadros en cada tenida fue desapareciendo.
         Estas prácticas fueron copiadas en el continente europeo, en Francia, Alemania y Austria, en la forma de carpetas, alfombras o tapices de Logia.

         Todavía más tarde, las telas fueron apoyadas en una tabla o en caballetes, y de ahí la costumbre de ejecutar el diseño sobre una tabla rígida.
         En la imagen, un antiguo Cuadro francés.
         Muy pocos Cuadros anteriores a 1800 han sobrevivido.
         A partir de esa fecha surge un conjunto de diseñadores ingleses de alto nivel, entre ellos John Cole, cuyos grabados aparecieron en 1801; y John Browne, que cerca de 1800 diseñó un conjunto de Cuadros a todo color.
         Con las obras de Josiah Bowring y John Harris los Cuadros ganaron aún más en calidad artística, incluyendo un conjunto simbólico más detallado y empleando la perspectiva con fines estéticos.
         En la imagen, Cuadro de John Harris (1801). Toda la simbología es del Aprendiz, pero la escuadra y el compás aparecen en la posición del Compañero.






         El mandil del Aprendiz es de cabritilla blanca («piel de cordero curtida en blanco»), y lleva siempre la solapa levantada.
         Esta configuración representa el ternario (la solapa triangular) apoyándose en el cuaternario (el cuerpo cuadrangular del mandil), constituyendo entre ambos el septenario.
         Notar, en esta imagen, la similitud entre el mandil del Aprendiz y la cara iluminada de la piedra cúbica de punta.
           





2° Compañero
         En inglés se dice Fellowcraft; en francés, Compagnon; en italiano, Compagno; en alemán, Gesell.
         Todas estas palabras, como dijimos, transmiten el concepto de «Compañero Obrero», es decir, de la pertenencia a una institución operativa.
         «El Obrero que hizo profesión de su Oficio» (Ferro).
         En este grado, por lo tanto, las lecciones deberían estar muy próximas a lo operativo, muy cercanas al trabajo real y concreto de la albañilería.

La letra G
         Es la clave filosófica del Compañero.
         Su simbolismo es dual: el de la letra G en sí misma y el de los nombres y palabras que comienzan con ella.
         La G parece haber reemplazado a la yod, que brillaba en el antiguo simbolismo.
         Así como la yod es la fuente o raíz de la que surgieron las demás letras hebreas, así la G, como inicial de Geometría, es el núcleo del que ha emanado todo el simbolismo masónico.  
         Si bien en la actualidad la G suele colocarse en el centro de la Estrella Flamígera, en el «Diálogo de Simón y Felipe» (1740), aparecen dos grabados: en uno la G se ve encerrada en un contorno de diamantes, y en el otro en el centro del Sol.



Cuadro
         Podemos distinguir en este grado, básicamente, dos “estilos” diferentes de Cuadro: el correspondiente al Escocismo (Ritos Escocés, Francés, etc.), y el correspondiente al Rito York.
         En el primero, se reproduce el Cuadro del Aprendiz, con las modificaciones correspondientes al Templo del Compañero, es decir, la Estrella Flamígera, la letra G, las cinco gradas, etc.
         En los Ritos York y Emulación, el Cuadro se basa en la escalera de caracol, y muestra a un Candidato a punto de ascender por la misma hacia la Cámara del Medio.
         A esto hay que agregarle: los Cuadros muy antiguos, que no hacían distinción de grados y mezclaban símbolos del Aprendiz, el Compañero y el Maestro y,
         los Cuadros muy modernos, en los que algunos Hermanos han dejado volar su imaginación y creatividad artísticas.
Cuadro del Rito Francés.
Nótese que sobre el piso en que se apoyan las columnas está representada la marcha del Compañero.

Mandil

La solapa baja, en contraste con la elevada del Aprendiz, representa la transición del esfuerzo vertical de este último hacia el estado de igualdad y equilibrio que corresponde al Compañero.

En otras palabras, el acto de “bajar la solapa” es equivalente a pasar de “la perpendicular al nivel”.




3º Maestro
         El grado de Maestro consiste en realizar de modo consciente lo que el Aprendiz (o el candidato a serlo) había efectuado de modo inconsciente en el Cuarto de Reflexión.
         «Pasará nuevamente por el reino de la obscuridad y de la muerte; pero esta vez pasará solo, sin necesidad de guía».

         “El grado de Maestro, bien comprendido y bien ejecutado, debe producir un efecto extraordinario, no sólo en el ánimo del que le recibe, sino también en el de los que asisten a la Ceremonia de Exaltación. Todos se pueden penetrar de estas palabras, que el Iniciado en los grandes Misterios de Isis leía al final de las pruebas: ´Aquel que haya sabido vencer el temor a la Muerte, y superado con éxito las pruebas de los elementos, podrá renacer del seno de la Tierra y ser admitido a la revelación de los Grandes Misterios´.
         El grado de Maestro ha recibido el calificativo de “Sublime”, de donde es frecuente la denominación “El Sublime Grado de Maestro Masón”.
         Este término anticipa los grados de la Logia Capitular de Perfección, y justifica la consideración del Maestro como el primero de los Altos Grados.
         El vocablo “Sublime” alude a la Palabra Sublime, la Palabra que se pierde y se recupera una y otra vez.
         Finalmente, algunos asocian este término con la “sublimación” alquímica, que el Maestro Masón aspira conseguir.

El Maestro:
         Se encuentra en posesión de la plenitud de sus derechos masónicos, por lo que puede acceder a la Presidencia de la Logia, a formar parte de la Gran Logia, etc.
         Ello se representa simbólicamente a través del hecho que puede tomar asiento en cualquier región del Templo, tanto al Mediodía como al Septentrión.
         Y que aquellos Hermanos que poseen Altos Grados, cuando están trabajando en una Logia Simbólica, deben portar el mandil y los atributos de Maestro Masón, independientemente de los otros grados que puedan poseer.

                                          
El cuadro.
«La Tumba de Hiram encierra todas las Tradiciones perdidas»
         Como dijimos, se coloca entre el Altar de los Juramentos y el ataúd que se encuentra en el centro del Templo.

         En general, podemos distinguir para el grado de Maestro tres grandes estilos de Cuadro:
         los más antiguos, que combinan símbolos de los tres grados,
         los Cuadros que se elaboraron a partir del siglo XIX, en el que todo está centrado en el ataúd de Hiram y los símbolos asociados (la escuadra y el compás, la acacia, etc.) y,
         los Cuadros actuales, en los que los artistas despliegan a veces gran imaginación.
Dr. Jorge Norberto Cornejo
Buenos Aires – Argentina mognitor1@yahoo.com.ar


No hay comentarios:

Publicar un comentario