Lamartine de Azeredo Babo
10 de enero de 1904 – 16 de junio de 1963
Río de Janeiro
Fue un compositor popular brasileño. Fue
uno de los doce hijos de Leopoldo Azeredo Babo y Bernarda Preciosa Gonçalves,
uno de los tres que llegaron a la edad adulta. Era el tío
de Oswaldo Sargentelli, cuyo padre, Leopoldo, nunca lo reconoció
oficialmente.
Lamartine Babo nació el mismo año que la fundación de su club corazón, el tradicional America Football Club. Tijucano y fanático estadounidense, Lamartine protagonizó escenas memorables como el desfile que realizó en un auto descubierto por las calles del centro de Río, vestido de diablo, celebrando el último campeonato de América, en 1960.
Aunque era un profano en la técnica musical,
Lamartine creó melodías fruto de su espíritu inventivo y versátil. Comenzó
a componer a los catorce años - el vals "Torturas do Amor"
y, a los dieciséis años, compone la opereta "Cibele". Cuando
fue al Colégio São Bento se dedicó a la música religiosa.
Se licenció en Ciencias Jurídicas y Sociales en la entonces
Facultad de Derecho de la Universidad de Rio de Janeiro, actualmente Facultad
Nacional de Derecho de la Universidad Federal de Rio de Janeiro (UFRJ).
Sin embargo, fue a través de las marchinhas de carnaval,
cantadas hasta hoy, como O Teu Cabelo Não Nega, Grado 10, Linda
Morena y A Marchinha do Grande Galo, que su nombre se hizo conocido
mundialmente como el Rey del Carnaval. En sus letras predominaba el
humor refinado y la irreverencia. Lamartine compuso la canción "Zeca
Ivo" en honor a su amigo y compositor José Ivo da Costa, Zeca Ivo. También
compuso en sociedad con Zeca Ivo la fado-toada "La vida es un infierno
donde las mujeres son demonios".
Como pocos, Lamartine llegó a los dos extremos del alma brasileña:
goce y sentimiento.
En 1937, en el pueblo minero de Boa
Esperança, en una situación inusual, compuso la famosa canción de
samba Serra da Boa Esperança.
En 1949 compuso los himnos alternativos
(no oficiales) de los 11 participantes del Campeonato Carioca de Fútbol de ese
año, patrocinado por el programa de radio Trem da Alegria, que editó LP de cada
uno de los clubes. En un día, Lamartine Babo compuso los famosos himnos de
los considerados seis equipos de fútbol más grandes y
tradicionales de Río de Janeiro, siendo el primero en su corazón
el America Football Club, además de Flamengo , Vasco da
Gama, Fluminense, Botafogo y Bangu. A continuación, se
escribieron los himnos de los clubes considerados "menores" (aunque
no menos tradicionales e importantes), a saber, São Cristóvão, Madureira, Olaria, Bonsucesso y Canto
do Rio. Estos himnos son, de hecho, himnos populares, siendo los himnos
oficiales de la mayoría de los clubes canciones diferentes. Según el
profesor y músico Bruno Castro, los himnos populares de Babo no se escribieron
todos a la vez, en un solo día.
Lalá, como se le conocía, era una de las personas más divertidas y
graciosas de su tiempo, que nunca perdía la oportunidad de un juego de palabras
o una broma . En una entrevista afirmó: "Pensé que era un
coloso. Pero un día, mirándome en el espejo, vi que no tengo regazo, solo tengo
hueso". En otro, el entrevistador pregunta cuál fue la mayor
aspiración de los artistas de la radiodifusión, Lalá no duda: "La
aspiración varía según el temperamento de cada uno ... Algunos quieren ir al
cielo ... ya que actúan en el éter ... Otros se evaporan". 'en
ese mismo éter ... Los pensamientos de la clase son éter ... oh ... genios ...
"- le valió el título de The Worst Pun of 1941.
Y también pasó el caso de Correos: Lalá fue a mandar
un telegrama, el telegrafista luego dio unos golpecitos con el lápiz en la
mesa Morse para su colega: "Delgado, feo y con voz
fina". Lalá sacó su lápiz y dio unos golpecitos: "Delgado, feo,
de voz fina y ex telegrafista".
Su primera marchinha grabada, fue el divertido "Os
Pants-Largas", en el que Lamartine se burlaba de los chicos que llevaban
pantalones de campana. En 1937, con la censura impuesta por el Estado
Novo de Getúlio Vargas, carnavalescos irreverentes como Lamartine
Babo se les prohibió utilizar la sátira en sus
composiciones. Sin la habitual irreverencia, los marchinhas ya no eran los
mismos.
***
Fue miembro de la Logia “Estrela do Rio”. – Brasil
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