4º Maestro Secreto
SIMBOLISMO
Al ingresar a este
grado nos encontramos en la denominada masonería capitular, es considerado
el transitar;
“…por una senda de
trabajo, descubrimiento y desarrollo personal que lo beneficiará a
él, a su familia y a la sociedad. Lo que se busca es que el H.·. tome
conciencia de sí, de la justicia del honor y la virtud.
Esto se logrará con el
estudio, que sublima los actos y hace del H.·. digno de llamarse hombre.
Este grado… es la base
que permite ir levantando poco a poco el basto taller de la edificación humana
para un bienestar personal y social. Se comienza por saber quién o qué es
el maestro secreto, su importancia en el desarrollo personal y social. Junto
con las acciones que debe de realizar para construir las Ccol.·. Que
darán soporte a la edificación social.
…tiene estudios que se
relacionan con el entorno social del H.·. que ha sido exaltado a este grado.
Como un ser social, no puede escapar del entorno que le rodea. Por ello es de
vital importancia que conozca y desarrolle su instinto social, que sepa, que su
entorno espera de él comportamientos y acciones constructivas y propositivas
para el mejoramiento de la sociedad.
La justicia, la razón
y el orden forman parte del desarrollo personal y social del H.·. Por ello su
estudio se hace indispensable para comprender y sobre todo conducirse por estas
vías en la vida diaria. El H.·. de 4° debe de hacerse notar por su conducta y
trabajo.
Siempre con orden,
justicia y razón en el trato con sus iguales, para ser reconocido como tal. Y
en el mundo Prof.·. para ser reconocido como una persona capaz y coherente, que
sea líder, que sea la voz que se levanta para exigir lo que está dispuesto a
dar.
Un individuo que
es consciente de él y de su entorno siempre buscará el crecimiento y
bienestar por medio de la justicia, el orden y la razón. No siendo un loco
necio que busca mediante la vociferación descontrolada, el abuso del poder y
del deber, el desorden social y la apatía cambiar su mundo.
Es a través de los
conceptos y práctica del pensamiento, la razón, el dialogo, la justicia y
el trabajo como se logrará llevar a uno mismo y a la sociedad a un
nivel de trabajo, competitividad, justicia y bienestar, todo en un entorno
basado en el orden.
Esto es parte de la
masonería capitular del 4° esto es lo que los HH.·. Trabajan y desarrollan para
ser verdaderos constructores, los constructores que necesita este país”.[1]
En esta oportunidad
los viajes implican:[2]
EL PRIMER VIAJE. Para
efectuar el reconocimiento del mundo interno o para entrar en la Tumba de
Hiram, el Maestro debe realizar su primer viaje, que esta entrada simboliza.
En este viaje, examina
los cuatro ángulos del Templo, donde se ven cuatro columnas que sostienen las
estatuas de las cuatro Divinidades;
Minerva y Apolo, en el Oriente; Hércules y Venus, en el Occidente. Estas cuatro
Divinidades simbolizan: la SABIDURÍA, la ILUMINACIÓN, el PODER y la BELLEZA.
También simbolizan los cuatro verbos del Mago: SABER, OSAR, QUERER y CALLAR.
Minerva es la Diosa de
la Sabiduría, primera condición del Maestro Secreto; Apolo es el Padre de la
Luz, que ilumina al Maestro para SABER OSAR; Hércules es el Poder del sabio
iluminado, que triunfa sobre sus debilidades humanas; y Venus es la Belleza y
el Amor Divino, en el Maestro Secreto, que trabaja silenciosamente en las
tinieblas de la ignorancia, y salva a la humanidad.
EL SEGUNDO VIAJE. En el
segundo viaje, el Maestro puede entrar en el Sancta Sanctorum, esto es, en el
TEMPLO DEL DIOS VIVO EN EL CORAZÓN. En este Templo no pueden entrar los
Iniciados de los grados simbólicos anteriores, porque aún no triunfan sobre sí
mismos.
Desde la Puerta del
Templo se irradia la Luz Blanca de Shekinah, la cual muestra la fusión de todas
las cosas en la Unidad; dos columnas delimitan la puerta; una tiene el número
0, y la otra, el 10.
El número 9 es el
principio de la Luz Divina Creadora, que ilumina el pensamiento, el deseo y la
obra del Maestro Secreto. Esta luz se halla en el corazón del hombre-Dios, que
exteriormente expresa la obra de Dios, en el Ser que trabaja y adora
silenciosamente como la faz del Maestro Secreto.
El número 10 es
creación mediante DUALIDAD, como después lo veremos. Ya hemos explicado el
significado de los tres colores de la Luz en el Tabernáculo, cuando hablamos
sobre la Iniciación hebrea, y también qué simboliza la Luz Blanca (Ver nuestra
obra El Aprendiz y sus Misterios. Primer Grado).
El Maestro Perdido
encuentra en el Oriente un Delta luminoso dentro de un Círculo; esto simboliza
al Infinito, el cual se manifiesta con sus tres aspectos, o Trinidad, dentro
del hombre mismo. Dentro del Delta brilla una estrella resplandeciente, símbolo
de que el humano se diferencia de Dios por su individualidad. Dentro de la
estrella, en el centro, se halla un punto de luz, que representa al Principio
de la Manifestación.
En este centro se ve
una serpiente que muerde su propia cola, símbolo de la faja zodiacal que
envuelve nuestro sistema solar; representa en el hombre las doce facultades del
Espíritu, periódicamente visitadas por el Sol Interno para vitalizarlas. Esta
serpiente toma la forma de la letra “G”, por su torbellino de Luz, y representa
en el Hombre al VERBO MANIFESTADO, por las nueve Musas o Divinidades.
La letra “G” se
transforma, dentro de una aureola azul, en Ojo Divino u Ojo Interno de la
Videncia en El Maestro Secreto y sus Misterios.
Después, el Ojo y la
Aureola Azul (Religión del Padre) se transforman en una luz amarilla (Religión
del Hijo, que es el Saber), y la pupila luminosa se manifiesta como la décima
letra hebrea, la cual es la YOD (ver la primera en el Capítulo La Iniciación
Hebraica, en El Aprendiz y sus Misterios.
Primer Grado, así como
el significado de la letra “I” o YOD, en La Magia del Verbo, incluida en El
Compañero y sus Misterios. Segundo Grado.
Luego, esta YOD se
transforma en THET, novena letra semita, que entre otras interpretaciones
significa el principio de la conservación mediante el amor como acto puro y
exento de deseo.
Aquí termina la visión
del Maestro Perdido. A continuación, el Círculo luminoso se ennegrece, el Delta
desaparece junto con la Estrella, y solamente THE NREEIGH queda en el centro
una Llave Blanca que descansa sobre la letra “Z”: a su vez, esta se separa de
los dos lados de la llave como un Alfa y una Omega.
La Llave es la razón,
principio de la Sabiduría Infinita, y descansa sobre la Letra “Z”, que
simboliza el arma del PODER CREADOR; este último es el Principio y el Fin de
todas las cosas.
EL TERCER VIAJE. En este
viaje, el Maestro Perdido tiene que descender del Oriente hacia el Sur, esto
es, tiene que imitar al Padre Sol que derrama su Luz y Energía para dar vida a
la fecundidad.
En este viaje aparece
el ARCA DE LA ALIANZA, otro símbolo del hombre, en la cual están escritas las
Leyes Divinas, y cuyo altar simboliza la Mente o el Corazón, como después
veremos. A continuación, se ve la Llave (Pensamiento Concentrado) con la cual
se abre el Arca. El Arca simboliza también la Tumba de Hiram, en la que el
hombre está sepultado en cada vida, y en la que se cree que el Maestro Interno
está muerto cuando desaparece de la vida externa durante el invierno.
Pero el Maestro
Secreto sabe que la muerte no existe, y así como la tierra vuelve a la vida en
primavera, de igual manera la semilla sagrada volverá a la vida en la matriz de
la Naturaleza, la cual es el Santuario.
El Maestro Perfecto
tiene que SEMBRAR TODO LO BELLO, ÚTIL Y PERFECTO.
EL ARCA DE LA ALIANZA.
El Arca simboliza, en la Iniciación hebrea, al hombre y a la matriz de la
Naturaleza.
Esta Arca es iluminada
por el Candelabro de siete luces, las cuales se refieren a los siete centros
vitales luminosos en el cuerpo del hombre, como ya se explicó en El Maestro de
los Nueve. Noveno Grado. El hombre es el Arca de la Alianza en miniatura.
Los dos principios del
Poder Creador, masculino y femenino en el hombre — origen de la manifestación
de la vida — son representados por los dos Querubines de oro, arrodillados
adorando, uno frente al otro, con las alas desplegadas, encontrándose sobre sus
cabezas.
La Corona de Oro que
adorna el Arca es el símbolo de elevados pensamientos, anhelos e ideas.
El Maestro Secreto
lleva la Llave Blanca para abrir el Arca y verificar lo que esta contiene, esto
es, trata de penetrar en su mundo interno para conocerse a sí mismo por medio
del conocimiento intelectual. Sin embargo, teme quebrar la llave, debido a la
fragilidad del material, y por eso es necesario confeccionarla con oro, plata y
cobre.
Estos tres metales
representan la FE, la ESPERANZA y la CARIDAD, como ya se explicó en El Maestro
de los Nueve.
Dentro del Arca u
hombre, se encuentran las dos Tablas de la Ley; en el subconsciente del hombre
están grabados sus tres deberes para con Dios, y en su consciencia objetiva,
los siete deberes para con su prójimo.
Dentro del Arca hay
también un Pote de Maná, símbolo de la MENTE que descendió del Cielo, desde el
Ser Recóndito hasta el cuerpo humano, mientras este se encontraba perdido en el
desierto de la Materia.
También se halla en el
Arca la VARA DE AARON, esto es, el PRINCIPIO CREADOR, que comienza en la
Glándula Pineal y termina en el Sacro u Órgano Sagrado, que vitaliza al Sexo, Las
Tablas de la Ley, atribuidas a Moisés, existieron desde que el mundo fue
creado, y estas leyes fueron grabadas en el corazón del Hombre, como dijo San
Pablo; también lo fueron sobre piedras, cinco mil años antes de Moisés.
EL CUARTO VIAJE. El
Maestro Secreto descubre en el Cuarto Viaje el problema de la Cuadratura del
Círculo.
La Cruz de los
elementos, con sus cuatro brazos, es la expresión tetrágona de la personalidad.
Esta personalidad-Cruz, para volver a la Unidad con el Infinito, que es el
Círculo, tiene que girar en la eternidad de la vida; el fuego de sus brazos, en
su movimiento circulatorio, se convierte en CRUZ ESVÁSTICA. Esta es la explicación
moral de la Cuadratura del Círculo.
La Piedra Cúbica o
Perfección Individual, en medio del Círculo de la Vida, es la Cuadratura del
Círculo. Dentro de la Piedra se encuentra el Sepulcro de Hi-ram con su corazón
palpitante. Es el Arca de la Alianza entre Dios y el Hombre.
El Delta con la
Estrella, que se encuentra encima de las alas de los Querubines, representa el
Verdadero Maestro Secreto o el hombre Dios.
EL JURAMENTO. El Maestro
Secreto tiene que jurar que cumplirá las siguientes promesas:
1°. No revelar los
secretos de los trabajos del Santuario y los misterios del Grado.
2°. Estudiar para
conocerse mejor.
3°. Ratificar su
promesa de trabajar siempre para el bien.
EL CORAZÓN RESUCITADO.
Con la Iniciación Interna, el Maestro Secreto se hace digno de trasladar el
Corazón de Hiram, esto es, obtiene el poder para resucitar al corazón de su
letargía en el sepulcro de la consciencia personal, y ofrendarlo en el Ara del
PADRE.
El Maestro de
Ceremonias o Angel-Guía Interno, le hace volver sobre la huella de su viaje
anterior, y le conduce hasta el Sepulcro que es simbolizado por la Piedra
Cúbica con el vértice arriba, símbolo del cuerpo perfeccionado y dominado por
el hombre, TRINIDAD SOBRE LOS CUATRO ELEMENTOS. Así, el hombre se hace
Omnipotente, con su corazón colmado de Amor y Justicia.
El Amor del corazón
debe manifestarse en el Occidente, mundo de la manifestación material.
El laurel o el olivo
(gloria) que lo adorna son la victoria sobre sí mismo y la paz en la vida
espiritual y física.
Adonhiram — el Señor
de la Vida Sublime — lo acompaña como el Maestro de Ceremonias en su viaje
directo del Occidente al Oriente, mientras que los demás Maestros lo defienden
de los espíritus perturbadores con la bóveda de acero. (Ceremonia en la que el
recipiendario debe pasar bajo las espadas de quienes lo reciben. N. del E.).
Deposita sobre la
Piedra Cúbica la Urna de Oro, la cual contiene el corazón puro de Hiram, esto
es, ofrenda el propio corazón como holocausto sacrificado sobre el Ara del
Padre en favor de la Obra Divina.
El traslado del
corazón de Hiram, o del propio recipiendario, se efectúa en sentido vertical y
se verifica desde el centro de la Piedra Cúbica o cuerpo humano, hacia arriba.
Lo mismo sucede en la Iniciación, en el mundo interno.
El corazón se eleva
hacia el Ser Recóndito y se convierte en un instrumento obediente de sus
mandatos.
LA CONSAGRACIÓN. Puesto
el corazón como holocausto sobre el Altar del Ser Recóndito, el Maestro Secreto
se arrodilla y extiende sus manos por encima de la Urna de Oro. Entonces, ahí
recibe cuatro golpes misteriosos que le transmiten el poder de los cuatro
verbos de la Magia: SABER, OSAR, QUERER y CALLAR.
LAS SEÑALES DEL GRADO.
Las señales del Grado son cuatro:
1°. “EL CALLAR”,
porque “quien sabe no habla, y quien habla nada sabe”. Quien no domina su
lengua, no puede dominarse a sí mismo.
2°. “LA ADORACIÓN”,
elevando las manos por sobre la cabeza para recibir la fuerza divina por medio
de sus antenas — los dedos — y, al mismo tiempo, la ofrece a la humanidad. En
el Cuarto Grado, el Mago debe usar esta fuerza o Agente Magnético, para dominar
sus instintos en las fuerzas creadoras de la generación, y los convierte en
poder de REGENERACIÓN.
3°. “LA SEÑAL DEL ARCO
DE LA ALIANZA”, que se efectúa con las dos manos juntas sobre el epigastrio, es
el emblema de la obediencia y la fidelidad y, al mismo tiempo, el de orden del
Grado.
4°. “LA SEÑAL DE
RECONOCIMIENTO”: los pies y las rodillas se juntan; los pies se dirigen hacia
el Ideal y las rodillas se flexionan en actitud de devoción. El movimiento de
la mano derecha demuestra que en el corazón se encuentra la Ley Divina, la cual
debe dirigir nuestra vida.
Las cuatro señales
representan el objetivo de los cuatro grados: el Silencio del Aprendiz, para
purificarse y elevarse; la Realización devota del Compañero; la Fidelidad y la
Perseverancia del Maestro; y la Expresión de la Luz Pura del Corazón, del
Maestro Secreto.
Ahora nos
detendremos en los símbolos propiamente dichos del grado:
ü El signo del silencio
.
ü La corona de olivo y
laurel: El laurel
representa la victoria alcanzada en el dominio (es decir, en el logro de la
totalidad), de sí mismo. El laurel, como símbolo de la gloria posterior a la
victoria, explica por qué, a la pregunta: “¿Eres
Maestro Secreto?”, se responde: “Tengo esa gloria”. El laurel se consagraba a Apolo. El olivo es el estado
de armonía que resulta de tal victoria. El olivo se consagraba a Palas Atenea.
El Misterio de la Conjunción
“Os
corono con la guirnalda de laurel y olivo -de laurel como emblema de la
victoria y del triunfo-, y sagrado para Apolo, dios de la Luz. Aquellos que
iban a consultar el oráculo délfico llevaban guirnaldas iguales, como lo hacían
los sacerdotes romanos en sus festivales. Os encontráis ahora sobre el sendero
que conduce hacia aquel oráculo mucho más grande que el de Delfos, el de la
Verdad Masónica, que nunca da respuestas equivocas para desviar y engañar.
Ahora comenzáis a escalar aquel sendero donde encontrareis la manera de
convertiros en ministro y sacerdote de la Verdad; y os corono con laurel y
olivo, emblema de fruición, lleno de esperanzas por vuestro éxito y vuestra
victoria finales”.[3]
ü
La
llave de marfil: Es la llave que
abre la puerta de los Misterios.
Es la llave del Santo de los Santos.
Es la llave de la balaustrada, en el Este.
Es considerada el símbolo por excelencia de los Maestros Secretos.
De hecho, algunos rituales antiguos decían que la Cámara de
este grado debería decorarse igual que la de Maestro, con la excepción del
Cuadro, en el que se destaca la llave, rodeada por un triángulo y un círculo.
Simboliza la apertura de la mente del Maestro a los grados
capitulares.
Es de marfil porque representa la osamenta que soporta la
estructura de la Logia de Perfección.
Se dice que el Maestro Secreto es la clave (llave) a los
Altos Grados, como el Aprendiz lo es a la Masonería Simbólica.
Se la consideraba la “marca”
del grado, y simbolizaba el silencio. Estaba “en un cofre de coral rodeado de marfil”. La llave es, entonces, la
lengua, y el cofre referido es la boca.
Y se dice que, aunque la llave no es de metal, es igualmente
preciosa, porque es una lengua limitada por todo tipo de inscripciones, que
sólo la cautela puede descifrar.
La llave indica no sólo el ingreso a un lugar, casa, morada
o Templo, sino fundamentalmente a un estado iniciático, a un grado entendido
como un nivel más alto de consciencia.
La
llave de marfil abre la puerta del Sancta
Sanctórum del Templo de Salomón. En su guarda o palanca está la inicial de
la Palabra de Pase. En otros grados, el material de la llave se modifica.
ü La letra Yod: Es la décima del
alfabeto hebreo.
Es el punto o falo creador, el poder del que emana el
Universo, la mónada. De donde la mónada y la década son equivalentes.
A veces se la reemplaza por la G, que significaría “Gloria, Grandeza y Gomel”; esta última
palabra es de origen hebreo y se interpreta como “belleza y recompensa”.
Gomel, Gomez o Gomes se dice que es la primera palabra que
pronunció Adán, justamente después de ver a Eva.
Más allá de lo inverosímil de esto, tiene sentido como
referencia a una Palabra primordial, vinculada con el Arquetipo de la Belleza.
ü La letra Zain:
Es la séptima del alfabeto hebreo. Es la espada.
Simboliza lo que divide, separa; en este caso, la
balaustrada que separa el Oriente del resto del templo.
En el alfabeto hebreo, está precedida por la Vau.
Aquella representa el or iashar, la “luz directa”, mientras que la Zain es or jozer, “luz que vuelve”, el nuevo amanecer.
La Zain es similar a la Vau, pero con una corona en la parte
superior (recordar el símbolo de la corona de olivo y laurel).
Recibir la corona de olivo y laurel es, por lo tanto,
acceder al Misterio de la letra Zain.
Siendo una corona, implica haber alcanzado una vislumbre de
Kether, el nivel más elevado de consciencia.
Se dice que la Zain simboliza que “el ser humano es la Corona de la Creación”.
ü La tumba de Hiram:
Algunos rituales
dicen que el Iniciado, al visitar la Tumba de Hiram, embalsama su corazón y lo
coloca en la Urna de Oro.
El Ritual
de Blanchard (2002), por ejemplo, indica que los miembros realizan un “peregrinaje”
fúnebre hacia el Sanctum Sanctórum, precedidos por Adonhiram, llevando la
Urna de Oro. Al comenzar dicho peregrinaje cuando deben colocarse los mandiles.
Al llegar
al Sancta Sanctórum, forman un semicírculo en torno de la Urna, la que es
custodiada por dos Guardianes.
Y se dice
que Hiram “amó la Verdad por sobre todas las cosas”.
Exclamándose
“el corazón de la Verdad, el corazón de Hiram”.
Esto es más
adecuado para el grado siguiente (Maestro Perfecto), pero la íntima asociación
entre ambos grados explica su presencia en el Maestro Secreto.
El corazón,
como punto central de la manifestación, es similar (pero no idéntico) al ojo. El corazón
que comienza a latir es equivalente al ojo que se abre.
El corazón transmite la
idea de algo oculto, secreto, profundo.
Una vez
colocado en la Urna, ningún profano volvió a ver el Corazón de Hiram.
La Urna de
Oro es el Athanor alquímico. ¿Qué transformaciones sufre el Corazón de Hiram en
el Athanor? Esto sería el primer paso hacia el renacimiento.
ü El Sancta Sanctórum y los objetos sagrados que contiene
El
candelabro místico de 7 luces: Cada Maestro Secreto es una de las luces
“Todos
los séptimos son queridos” (proverbio cabalístico)
Cada
lámpara es uno de los Siete Elohim (Potencias Creadoras)
ü El Arca de la Alianza: Estaba hecha con madera de acacia.
Contenía la vara de Aarón, el vaso de maná y las Tablas de la Ley.
¿Proviene del ataúd de Osiris, de los Misterios Egipcios?
La tradición masónica del Rito York dice que, además del Arca “oficial”,
había un Arca Substituta en las Cámaras subterráneas del Templo.
ü Las Tablas de la Ley: Son palabras escritas en piedra.
La historia bíblica es confusa, y habla de dos conjuntos de tablas, que
no se sabe si tenían el mismo contenido.
¿Había algo más en las Tablas aparte de los Diez Mandamientos? ¿Había
alguna enseñanza esotérica?
“El Oriente de la Logia representa el Santo
Santuario del primer templo en Jerusalén, y los misterios más secretos de la
Masonería, de los cuales os encontráis ahora separado por una barrera
infranqueable. Pero poseéis la llave; y algún día os será permitido de abrir la
reja y franquear la barrera. La pasión, el prejuicio y el error interponen
muchos obstáculos entre el hombre y la verdad; pero ninguno de estos
obstáculos, para impedir encontrar la verdad, son suficientemente poderosos
para atajar al hombre que con energía y perseverancia, con buenas intenciones y
motivos sanos, se propone alcanzarla”.[4]
ü El ojo:
clara influencia del jesuitismo: Se dice que el ojo representa que “los
Maestros Secretos. deben vigilar constantemente a los hermanos en las Logias
Simbólicas, como Adonhiram, el Inspector siempre Vigilante”.
O que es “el ojo que ve todas nuestras faltas”.
Todo esto no es más que influencia jesuítica.
El ojo: una
lectura esotérica
-
Cuando alguien abre sus ojos, está recuperando la
consciencia. El ojo que se abre, entonces, es la consciencia que se despierta.
-
O el Universo que despierta de la Inmanifestación.
-
Es el Tao inconsciente transformándose en el Tao
expresado.
-
Según
el Ritual de Dalchó (1801), en la puerta del Templo de los Maestros Secretos
debería pintarse un ojo dorado, análogo al que figura en la solapa del mandil.
El ojo y el
Sol
Algunos Rituales comparan el ojo que figura en el mandil con el Sol, del
que sería el símbolo. Hacen derivar el nombre Osiris de Osh-iri, que sería
el “ojo en el cielo”, y vinculan este
grado con los Misterios Egipcios.
Otros comparan el ojo con el círculo que rodea la letra Yod, en el
símbolo en el Oriente.
“El ojo sobre la solapa azul del mandil es un
símbolo del sol en el firmamento, ojo del universo, y para los antiguos él era
Un emblema y la imagen de la Divinidad, el gran arquetipo de la luz, “Ordo ab
Chao”, Luz y Tinieblas, decía Zoroastro son los caminos eternos del mundo. Un
ojo era en los jeroglífico egipcios el símbolo para la palabra IRI (para
efectuar ceremonias religiosas), y la segunda silaba del nombre Osiris (Os-
In), el sol divinizado, la personificación del principio del bien. Ya sabéis
también de cómo el nombre del Maestro Khurom, (Om significa sol) está conectado
con este mismo símbolo”.[5]
ü La balaustrada:
Está hecha de columnas blancas y negras. Debería tener una
puerta (“la puerta estrecha”) en el
centro. Es la puerta entre los Tres Sephiroth superiores y los Siete de la
manifestación.
El Maestro Secreto…
Pasa de la escuadra al compás. Ha visitado la tumba de
Hiram y, en unión con sus Hermanos, ha llorado su pérdida. Ha visto crecer la
acacia, y ahora desea verla florecer. O sea, ha completado el grado de
Maestro y espera obtener sus frutos. Recordemos que la vara de Aarón había
florecido mágicamente.
Y en forma más esotérica:
ha visto la muerte de Hiram (acacia) y ahora espera verlo renacer. Nótese que en todo el grado se repite la noción
de VER…
Ha visto el interior del Santo de los Santos. Ha sido
designado uno de los siete, y guardián de los objetos sagrados del Templo.
De la escuadra al compás
es decir…
ü Del pavimento a la cúpula.
ü De la línea recta a la curva.
ü De la base a la coronación del
edificio.
ü De la “tierra” al “cielo”,
simbólicamente entendidos.
ü De los fenómenos a los principios
que los explican.
[1] M.·. en I.·. Ulises Gutiérrez Lazcano- Masonería Capitular:
Grado 4° su importancia en el R.·.E.·.A.·. y A.·. http://www.fenixnews.com/2014/11/25/masoneria-capitular-grado-4-su-importancia-en-el-rea-y-a/
[2] Seguiremos el trabajo de Dr. Jorge Elías Adoum: http://eruizf.com/masonico/autores/adoum/adoum_cuatro_03.html
buenisima..excelente...felicitaciones al QH:. que hizo este trazado..TAF:. SFU..
ResponderEliminarMuchas gracias, gran trazado
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