FEDE SANTA en Buenos Aires
Los caballeros templarios idearon un sistema para poder
dejar su mensaje, por ello tenemos dos ramas:
a. La
Massenie du Sant Grial. Ella esta compuesta por aquellos constructores de
catedrales templarios, dejando sus secretos a través de sus símbolos.
b. La
Fede Santa. En ella encontramos a escritores, pintores, etc. Que por
intermedios de sus obras transmiten sus mensajes para los iniciados.
Miembro de esta última rama es Dante Alighieri, Será casualidad que la obra de “La Divina Comedia”
se unan símbolos cristianos, judíos y musulmanes para marcar el camino desde el infierno de la mano de Virgilio (el poder de Roma) hasta lograr alcanzar el cielo de la mano de Beatriz.
En
el trayecto se mencionan a los templarios y a Jacques de Molay. Dudas que se
nos presentan, puede ser una coincidencia que Dante se encontrara con Jacques
de Molay una semana antes de ser apresado, y llegara a estar en las primeras
audiencias en contra de los templarios, y aún más asistir a su ejecución en la
hoguera.
Sus iniciados estaban obligados a comunicarse en verso por
lo que no es casual que Bocaccio, Ariosto y Torcuato Tasso hayan sido también sus
integrantes. En la “Divina Comedia” Dante intercala misteriosas referencias al
Temple, seguramente mensajes en clave: “Veo al nuevo Pilatos tan cruel/ que,
insaciable y sin decreto, /hecha sobre el Templo su ambicioso velo” que remite
a Felipe IV y a la destrucción de los templarios.
La mirada correcta para visualizar la obra de Dante, es
la esotérica.
El esoterismo de Dante es más que patente y lo advierte
él mismo en un verso, para que los que contemplan la vida sin el velo, puedan
penetrar en el verdadero significado de su obra.
“O voi ch'avete gli´ intelletti sani,
Mirate la dottrina
che s´asconde
Sotto il velame
delli versi strani!”
La Fede Santa era una orden secreta laica o seglar, que
ya existía antes de que el Temple fuese abolido o extinguido, que no
exterminado. El denominador común de la orden, como en tantas otras, era su
tradición iniciática propia del temple y las doctrinas ismailitas, como los
(haschischin), cuyo nombre en realidad significa “Guardianes de Tierra Santa” y
no los significados que se les ha dado y que han derivado en una secta de
asesinos que consumía hachís. Es indudable la estrecha relación y colaboración de
los haschischin con los templarios, que también eran guardianes de Tierra
Santa, su coincidencia en los colores adoptados y su jerarquía. Se tiene
constancia que Templarios y haschischin tomaron contacto en Siria antes de
1128, año de la redacción de la Regla del Temple y la confluencia de doctrinas
y símbolos, nos hace llegar a la conclusión de que tanto estas dos ordenes,
como los Cataros, Rosacruces y otras corrientes similares, fueron alimentadas
por enseñanzas de diversas culturas, entre ellas el Islam.
En el Museo de Viena existen dos medallas que representan a Dante y al pintor Pierre de Pisa. Las dos llevan la enigmática inscripción en iniciales de “F.S.K.I.P.F.T” cuya traducción es "Fidei Sanctae Kadosch Imperialis Principatus Frater Templarius", donde las palabras “Fidei Sanctae” se refieren a la “Fede Santa”, a cuya orden pertenecían los dos personajes nombrados, con el titulo de Caballeros
Kadosch, grado 30 de la Masonería, templario por excelencia, que significa en hebreo “Santo o Consagrado” y “Frater Templarius” delata su filiación al Temple. Se da la particularidad de que la primera de las medallas, la de Dante, a pesar de que la sitúan en el Museo de Viena, no aparece en el catálogo e inventario, por lo tanto es como si no existiera, contemplando la duda de que figure expuesta y la segunda, no se encuentra en dicho museo, si no que la he podido localizar en el Museo de Harvard. Como siempre, el secretismo.
Lo que refleja en síntesis la obra de Dante es en
definitiva, los grados de iniciación, jerarquías espirituales por la que ha de
pasar el hombre para su perfección, alquimia espiritual, kabbala hebraica,
palabras de paso y signos de reconocimiento como adoptaron los Cataros y la
masonería primigenia.Sin duda la obra de Dante esconde, para el que desee
quitarse el velo, la más elevada gnosis templaria, sobre todo en la
obra que dejó sin titulo porque murió antes y que nominó Boccaccio como “Divina
Comedia”, en la que es Bernardo de Claraval, el que le lleva a su viaje de iniciación.
Boccaccio plasma en su obra “Tratatello in Laude di Dante” que Dante viajó a
París en 1309, cuando ese mismo año se celebraban las sesiones de la comisión
eclesiástica de París, ante la cual deberían de comparecer los templarios,
entre ellos Jacques de Molay el 26 de Noviembre de ese año, mostrando así su
apoyo al Gran Maestre y quizás el cruce de instrucciones.
En ella hay 13 cantos en los que hace referencia al
Temple y a los Fedeli d’Amore, que estuvieron ocultos por temor a hacerlos
públicos y que posteriormente fueron encontrados por un discípulo
suyo, Piero Ravignani por la revelación del lugar donde estaban
escondidos, 8 meses después de la muerte de Dante.
Por más que se empeñen los detractores, esas enseñanzas
siguen vivas al igual que los Templarios que permanecen entre nosotros.
Indudablemente el esoterismo de Dante abarca mucho más, pero invito a
descubrirlo. Como colofón recoger las palabras del Cardenal Francesco da
Barberino, miembro de la Fede Santa en su obra “Documenti d’Amore”
“Yo soy la fuerza
y miro si viniera
alguno que este
libro abrir quisiera;
y si no fuese el
de tener derecho
con esta espada le
atravieso el pecho”.[1]
René Guénon: Sobre
el hermetismo y El
esoterismo del Dante
En Buenos Aires se encuentra el Palacio Barolo y toda una
historia que envuelve al mismo con el Dante.
Fuentes:
http://pachoodonnell.com.ar/articulos/item/402-la-verdadera-historia-de-los-templarios
http://gotica-manticora.blogspot.com/2013/05/el-temple-la-fede-santa-y-dante.html
http://templarios-historia.blogspot.com/p/la-massenie-du-sant-grial-y-la-fede.html
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