Lindoro B. Forteza
26 de enero de 1837
– 2 febrero de 1907
Ministro de estado, magistrado judicial y
codificador.
Era hijo de un maestro español llamado Miguel
de Corteza.
Su carrera administrativa comienza en el
período del gobierno de Gabriel Pereira (gran protector de la Orden ) cuando es designado,
el 31 de mayo de 1856, oficial 2º del
Ministerio de Gobierno.
El 24 de febrero de 1858 es ascendido a
oficial 1º, ejerciendo al mismo tiempo el cargo de Secretario de la Junta Económica Administrativa.
El 2 de agosto de 1859 es trasladado con
idénticas funciones al Ministerio de RR.EE., en mérito a sus adelantados
estudios de derecho que le permitieron doctorarse en jurisprudencia el 25 de
agosto de 1860.
Con el grado de Sub-Teniente integró las
Guardias Nacionales durante la revolución del año 1863, pero sus ideas
moderadas y su espíritu tolerante le permitieron aceptar en el año 1867, el
cargo de Juez de Crimen con el cual inicia su carrera en la magistratura.
En 1869 es designando Juez de lo Civil de la
1ra. Sección y el 27 de enero de 1874 la Asamblea General
lo nombró miembro del Tribunal de Justicia cargo que mantiene hasta febrero de
1879 en que renuncia con sus demás compañeros al restablecerse el régimen
constitucional a la caída del Cnel. Latorre. Pero el 14 de marzo de ese mismo
año la Asamblea
lo reelige para que continúe en el desempeño de su cargo.
En ocasión de producirse el conflicto, en el
año 1862, entre el Poder Judicial y el Ejecutivo y el Legislativo mancomunados
en la presidencia de Santos en ocasión en que el Tribunal prefirió renunciar
antes que aceptar las exigencias autoritarias que aquel quería imponerle, el
Dr. Lindero Corteza fue el único que no renunció entendiendo que su actitud,
que fue duramente criticada, estaba dirigida en “Bien de la justicia, de los intereses permanentes del orden moral y
material y la responsabilidad de los puestos que desempeñaban”.
En el año 1885, siendo Presidente del Supremo
Tribunal de Justicia, es designado con el Dr. Carlos de Castro, ministro de RR.EE. y el Gral. Máximo Tajes, Ministro
de Guerra y Marina, para integrar la Comisión que devolvería los trofeos de guerra al
Paraguay conquistados durante la Triple
Alianza.
Al año siguiente se le confía la secretaría
de Culto, Justicia e Instrucción Pública.
Habiéndose negado sus compañeros de gabinete
a acompañar las medidas con las cuales Santos pretendía restringir la Libertad de imprenta,
Lindero Corteza, a la par de sus colegas, hizo renuncia de la Cartera el 28 de octubre.
Durante la presidencia del Gral. Tajes fue
nominado como Ministro de la
República ante el gobierno de Francia, por decreto del 12 de
setiembre de 1889, cargo que desempeñó hasta el mes de diciembre de 1891.
Merece citarse de la vasta y proficua labor
realizada por el Dr. Lindero Corteza, sus trabajos jurídicos como miembro de la Comisión redactora del
código penal y de las revisoras de los
códigos rural y de minería.
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Fue integrante de nuestra Masonería nacional,
integrando la Logia Caridad el 17 de
setiembre de 1860.
Fue un masón con espíritu liberal y profundo
sentido humanista que sirvió a su Patria y a la masonería con hidalguía y
honor.
A su muerte ostentaba el grado 33.[1]
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