Los Illuminati
(1)
Con este nombre se da la existencia de un grupo, que dio y
da para escribir aspectos hasta fantásticos y disparates, los cuales estos
últimos son los más repetidos y la imaginación de la gente cada vez le permite
dar color que impiden un conocimiento racional de los mismos.
Es nuestro propósito comenzar una presentación del momento
de su origen y hasta el presente si es que existen aún hoy e incluso si puede
rastrearse su presencia en Uruguay.
HISTORIA Y
LEYENDA
“En la actualidad, sin embargo, los illuminati son considerados algo
mucho más importante y siniestro, dado que se han convertido en la piedra de
toque de la visión que las teorías conspiratorias han desarrollado sobre las
sociedades secretas, un “hombre del saco” para todo aquel que desconfía o no
siente predilección por las sociedades secretas y cree que no apunta a nada
bueno. En prácticamente cualquier teoría conspirativa aparecen los illuminati,
cuya identidad exacta no es clara y cambia de una teoría a otra. Las
sugerencias son tan amplias que abarcan desde los francmasones y los judíos
hasta la línea de descendencia de Jesús y los alienígenos reptiles que cambian
de forma y comen bebés. Es necesario entonces establecer una clara distinción
entre los illuminati histórico y los illuminatti de la leyenda de la
conspiración”.[1]
Origen
Se reconoce sus ideas en la historia en los inicios de las
primeras sectas que buscan reivindicar el conocimiento esotérico. Pero se puede fechar el 1º de mayo de 1776,
conformándose la doctrina filosófica de los Illuminati, a cargo de Adam Weishapt, profesor de Derecho
Canónigo de la Universidad de Ingolstadt de Baviera (Alemania), surgen los Illuminados de Baviera, también
conocidos como Orden de los Perfectibilistas
y Antiguos e Iluminados Videntes de Baviera.
 Nació en Ingolstadt, el 7 de febrero de
1748 en el seno de una familia judía, cuyo padre era el rabino. A
Estudiaba Derecho, economía, política, historia y
corrientes ocultas, como el gnosticismo y la filosofía de la
reciente masonería. Algunos escritores argumentan que en 1771 conoció a
un mercader danés llamado Franz Kolmer, quien lo introdujo en las
prácticas mágicas de Egipto y las doctrinas antirreligiosas de
los maniqueos, provocando en la mente del joven Weishaupt un
espíritu anarquista y poco tolerante con la religión.
En 1772 se convirtió en
catedrático de Derecho civil y canónico de la Universidad de Ingolstadt.
La concepción liberal de Weishaupt entró rápidamente en conflicto con los
jesuitas. No obstante, y gracias a la disolución de la Compañía de
Jesús por el Papa Clemente XIV en 1773, Weishaupt llegó a ser
decano de la Facultad de Leyes de la universidad, cargo que había estado en
manos de los jesuitas desde hacía noventa años.
Entre 1773 y 1775 viajó
a Francia, en donde conoció y desarrolló amistad con el Marqués de
La Fayette y Maximilien Robespierre. Sus inquietudes ideológicas le
llevaron a ingresar en la masonería, saliendo poco después decepcionado
con lo que consideraba simples reuniones sociales.
Decidió fundar su propia
orden en 1776, basándose en lo que había visto en los jesuitas y la
masonería, llamándola primero como "Los
Perfectibilistas" y más tarde como "Los Iluminados de Baviera" (Illuminati). Weishaupt tomó el sobrenombre de "Spartacus",
ya que se decía ser un libertador de la conciencia humana, arrebatando al
hombre de los dogmas y las religiones que lo esclavizaban.
Decepcionado con los pocos
miembros con los que contaba su orden, pidió ayuda a uno de sus adeptos, el
barón protestante Adolph von Knigge (Philón),
el cual dio un gran impulso a la sociedad, llegando a crearse logias en Alemania, Francia, Austria, Italia, Suiza y Rusia.
Von Knigge abandonó la orden en 1784, no pudiendo soportar más la pedantería
dominante de Weishaupt, que con frecuencia recurría a malas formas. Acusó a
Weishaupt de "jesuitismo"
y de sospechoso de ser "un jesuita
disfrazado" (Nachtr., I, 129).
El 22 de junio de 1784, las
autoridades políticas y religiosas de Baviera dieron orden de perseguir a los
miembros de la masonería y los Illuminati. Desbaratada su sociedad, Weishaupt
y su familia huyeron a Gotha, en Sajonia. Fueron perseguidos, ya
que se descubrió documentación en la casa de Weishaupt que pretendía dominar
todas las facetas de la masonería, derrocar a las monarquías de Europa y
acabar con la Iglesia católica usando los mismos métodos que
emplearon los jesuitas para defenderla de los protestantes.
Recibió ayuda del
duque Ernesto II de Sajonia-Gotha-Altenburg (1745-1804) y
vivió en Gotha escribiendo una serie de obras sobre el iluminismo, entre
ellas una historia completa de las persecuciones de los Illuminati en Baviera
(1785), una imagen de las Luces (1786), una disculpa para los Illuminati
(1786) y un sistema mejorado de las Luces (1787).
Adam Weishaupt murió en
Gotha el 18 de noviembre de 1830, renegando de su fe católica en el lecho de
muerte. Le sobrevivieron su esposa, Anna María Weishaupt (de soltera
Sausenhofer), y sus hijos Nanette, Charlotte, Ernst, Karl Weishaupt,
Eduard y Alfred. Weishaupt fue enterrado junto a su hijo Wilhelm, que le
había precedido en la muerte en 1802.
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Esta síntesis de la biografía, ya nos dan algunos aspectos
de este grupo, que lo lleva hacer
acusados de conspiración, de buscar el poder ¿Cuánto de real hay de esto?...
Más arriba hablamos de Franz Kolmer,
“…algunos investigadores sospechan que es
el mismo hombre de nombre Altotas que el mago de la corte francesa y revolucionario
Cagliostro mencionó en alguna ocasión y a quien éste admiraba, aprendió el
conocimiento esotérico de Egipto y Persia en os años que vivió en el Próximo
Oriente. Kolmer predicó una doctrina secreta basada en una antigua forma de
gnosticismo llamada maniqueísmo que utilizaba la palabra “Iluminado” antes del
siglo III D.C.
Según se dice, Kolmer
se reunió con Cagliostro en la isla de Malta, la vieja fortaleza de los
Caballeros Termplarios, en su camino hacia Francia y Alemania a principios de
1770. Cagliostro, el futuro revolucionario francés, estaba entonces involucrado
en actividades masónicas con el famoso amante veneciano Giovanni Giacomo
Casanova, así como con el misterioso conde de Saint-Germanin.
En Alemania, Kolmer
transmitió sus secretos a Weishaupt, que pasó varios años determinando cómo
consolidar todos los sistemas ocultos en su nuevo orden de los Illuminati. La
devoción de Weishaupt por los antiguos misterios de Mesopotamia se demuestra en
el hecho de que hizo adoptar el calendario persa a
los Illuminati”.[2]
También tiene un papel destacado el masón y barón Adolf Franz Friedrich von Knigger (1752-1796) tomando el nombre clave de Filo,
cuando fue reclutado en 1780, para difundir la orden por el resto del
continente europeo.
Se dice que en 1784 contaban con unos 2000 miembros,
encontrándose hombres famosos y aristocráticos. Sin duda para ese logro, jugó
un papel clave Xavier Zwack -nombre clave Cato-, este se había ingeniado para controlar una
logia masónica en Munich, donde recluto a muchos de sus miembros, entre ellos
encontramos a Johann von Goethe y el Príncipe Fernando, duque de Brunswick, a este
último la Iglesia católica decía; “el más
importante líder de la francmasonería europea y espléndido representante del
iluminismo de su época”.
Otro tema es su
designación
Como se ve en su vida Weishaupt estuvo una fuerte influencia
de los jesuitas, tomando su nombre de dicha Orden, de un grupo disidente
secreto de España, denominados Los Alumbrados. “…enseñaban una forma de gnosticismo, creían
que el espíritu humano podía alcanzar un conocimiento directo de Dios y que los
ornamentos de la religión formal eran innecesarios para aquellos que buscaban
la ‘luz’”.[3]
La visión de San Ignacio de Loyola de Peter Paul
Rubens
Recordemos que Loyola
fue un visionario místico, el cual fue sospechado en más de una ocasión de estar asociado a los
alumbrados. Pero más allá de haber enfrentado varios juicios ordenados por las
autoridades de la iglesia, siempre pudo salir indemne.
Una revista de 1969 establece que el origen de los Illuminati, se da a partir de una secta
musulmana Ismaili, los cuales
tenían una estrecha vinculación con los Caballeros Templarios, siendo estos
últimos los encargados de llevar a los Illuminati
al continente europeo, antes de la creación de Weishaupt. “Ese artículo afirmaba que Weishauptestudió las enseñanza del líder de
los infames Asesinos musulmanes, que se distinguían por su consumo de hachís, y
que él mismo conseguía “iluminación” mediante la ingesta de marihuana de su
propia cosecha”.[4]
Ahora entrándonos al movimiento, se le ve una fuerte
inspiración de los movimientos intelectuales de la Ilustración, donde la
libertad individual y el papel de la razón y enseñanza que podría alcanzar el
hombre la perfección.
Para romper las cadenas con el Estado y la Iglesia se debía
alcanzar una educación completa filosófica y moral. Si bien se le puede acusar
de ateísmo, se nota la influencia de los jesuitas en Weishaupt, pero en l aversión esotérica. Según parece se le atribuye esta
frase:
“¡Los príncipes y las naciones desaparecerán
de la faz de la Tierra!”
“Sí, llegará el momento en que le hombre no
reconocerá otra ley que el gran Libro de la Naturaleza; y esta revelación será
la obra de las sociedades secretas y es uno de nuestros grandes misterios.”
Doctrina
Sus planes apuntaban a la perfección de la naturaleza humana
y la sociedad, derrocar a la Iglesia católica e introducir un sistema universal
de republicanismo democrático.
“En un momento, sin
embargo, cuando no había fin de hacer juego y de abusar de las sociedades
secretas, pensaba usar esta flaqueza humana de un objetivo real y digno en
beneficio de las personas. Yo quería hacer lo que los jefes de las autoridades
eclesiásticas y seculares deberían haber hecho en virtud de su oficio”. Adam
Weishaupt
Algunos de sus Manifiestos, describen así las seis metas a
largo plazo de los illuminati:
v
Abolición de la monarquía y de todo gobierno
organizado según el Antiguo Régimen.
v
Supresión de la propiedad privada de los medios
de producción para individuos y sociedades, con la consecuente abolición de
clases sociales.
v
Abolición de los derechos de herencia en
cualquier caso.
v
Destrucción del concepto de patriotismo y nacionalismo
y sustitución por un gobierno mundial y control internacional.
v
Abolición del concepto de la familia tradicional
y clásica.
v
Prohibición de cualquier tipo de religión (sobre
todo la de la Iglesia católica) estableciendo un ateísmo oficial.
Aunque la orden no era democrática, puesto que Weishaupt y
Knigge tomaban las decisiones argumentando que eran los más preparados y
conocedores de secretos ancestrales, su misión fue abolir todos los gobiernos
monárquicos y las religiones estatales en Europa y sus colonias.
Weishaupt escribió: “el fin justifica los medios, la muerte es el
fin del problema humano”. El carácter real de la sociedad fue una
complicada red de espías y contraespías. Cada celda de aislamiento de los
iniciados informaba a su superior sobre las operaciones que realizaba en pro de
los ideales de la orden.
“La salvación no está
allí donde los tronos fuertes son defendidos por la espada, donde el humo de
los incensarios asciende al cielo o donde miles de hombres fuertes miden con
pasos los ricos campos de la cosecha. La revolución que va a producirse será
estéril si no es completa”. Adam Weishaupt
Organización
Tenía planes detallados y ambiciones de los iniciados, el
entrenamiento y la educación para los iniciados, también llamados Minervales.
Por ello el nombre adoptado de Espartaco, como líder de
los esclavos que eran conducidos hacia la libertad.
¿Quién
puede ingresar?
“Quienes no cierre su
oído a los lamentos de los miserables, ni su corazón a la pena; quien sea amigo
y hermano de los desafortunados; quien tengan un corazón capaz de expresar amor
y amistad; quien se mantenga firme en la adversidad, no se sienta abatido por
lo que le toque vivir y no se considere intimidad por las dificultades; quien
no se burle ni desprecie a los débiles; aquel cuya alma sea susceptible de
crear grandes planes, desee superar todas sus motivaciones y se distinga por
sus hazañas de benevolencia; quien renuncie a la holgazanería; quien considere
que ningún conocimiento que tenga la oportunidad del adquirir es superfluo y
adopte el conocimiento de la humanidad como su estudio principal; quien, cuando
se cuestionen la verdad y la virtud, a pesar de la aprobación de la multitud,
sea suficientemente valiente como para seguir los dictados de su propio
corazón, esa persona será un candidato adecuado”.
En su comienzo conto con tres grados básicos:
Novicio
Minerval
Minerval Iluminado
Queda claro que minerval
es referencia a la diosa romana de la sabiduría Minerva.
Es probable que el ingreso de von Knigge y su plan de sumar
masones al grupo hizo sumarle más grados superiores.
Por lo que sabemos llego a tener 13 grados. Cada grado
poseía sus rituales y secretos propios los cuales no estaba autorizado revelar
a grados inferiores, y cada miembro juraba obediencia incondicional a sus
superiores.
“Los novicios debían
preparar un informe detallado sobre sus propias vidas y carácter, incluyendo
una lista de todas sus amistades, enemigos, libros, etc. Además, tenían que
estudiar durante dos años y reclutar a otros novicios, y mientras tanto eran
mantenidos en la “oscuridad” para respetar la naturaleza de los illuminati. El único
miembro al que podían conocer era la persona que les recluto. Sólo Weishaupt
conocía la lista completa de los miembros, y solamente unos pocos ayudantes
cercanos sabían que él fundador y general de la orden. En alguna ocasión se ha señalado
que la organización de los Illuminati tenía todas las características tanto de
un culto, en el sentido de que buscaba controlar el crecimiento de sus reclutas,
como de una célula terrorista, por el modo en que compartimentaba a sus
miembros”.[5]
I.
Primera
clase: Vivero:
1.
Preparatorio,
o también llamado Grado 0. Se
impartían, de forma simbólica, en el exterior del Templo, a las puertas del
Atrio y son Preparatorio
2.
Novicio
(Novillero). Se corresponde con la Primera
Entrevista se relaciona con la Intención del Postulante de entrar en contacto primero y
penetrar en el interior de la Fraternidad
después. En este punto, los Fratres o
Hermanos que entren en contacto con
el Profano le orientarán someramente
de lo que va la Fraternidad y
requerirán, de aquel, que explique lo que lo mueve a intentar solicitar su
entrada en la Orden.
Si algunas de las explicaciones que dé el
profano al hermano entrevistador son erróneas, el Fráter se encontrará en la obligación de sacarlo de su error y le instará
a que siga con su estudio externo respecto a la Orden. Debe de pasar un cierto periodo de tiempo entre el primer
contacto y la primera entrevista así como entre ésta y las siguientes.
3.
Minerval.
Se corresponde con la Segunda entrevista por parte de un segundo
Hermano de la Fraternidad, se
corresponde con la Decisión. En
este punto, el postulante debe de tomar la decisión de continuar hacia adelante
o retirarse y su actitud deberá de tomarse muy en cuenta por parte del Fráter entrevistador. Se le invitará a
que muestre sus conclusiones respecto a las cuestiones erróneas que le fueran
corregidas en la anterior entrevista y se le contestará, en lo posible, a todas
sus dudas.
En todos los casos, los entrevistadores deben
hacerse acreedores de la confianza del postulante dado que, de otro modo, éste
se cerraría en sí mismo y podría continuar en el error hasta el momento y
después de la Iniciación. Cosa que no
sería bueno ni para él ni para la Orden,
pues crearía frustración, malos entendidos y un valioso tiempo perdido por
parte de ambas partes. El Hermano
entrevistador invitará al Profano a
que siga siendo paciente y que medite su decisión, durante un cierto tiempo,
mientras sigue con su estudio de investigación profano.
Cuando se logra este nivel sus miembros podían asistir a las
reuniones de su colonia o logia local.
4.
Iluminado
Menor. Se corresponde con
la Tercera y última entrevista se corresponde con la Acción. La Voluntad del postulante le
incita a ponerse en marcha y muestra al Hermano
entrevistador que tras sopesar los pros y los contras, tras ser contestadas
todas las dudas que le puedan ser respondidas, quiere seguir adelante. A partir
de aquí, se le solicita al profano, iluminado por su intuición, que desea
seguir el camino, que aplace sus estudios emprendidos, respecto a la Orden, hasta que pueda ser invitado a la
Iniciación, si el Templo así lo decide tras la
deliberación de todos los hermanos y después de considerar los informes de las
entrevistas.
Ahora se requiere un tiempo de vaciado y meditación; dado que de cara a la
iniciación es deseable que el postulante vaya lo más virgen posible y sin que
pueda dar nada por sentado. La sensación mental del postulante debería de ser
semejante a la de un niño antes de ir a dormir una Noche Buena o de Reyes Magos.
Ciertamente, su mente especulará sobre lo que encontrará o no encontrará, lo
que pasará y lo que no pasará, el misterio que le espera para ser descubierto,
en suma; pero esa es y debe de ser siempre la actitud del Iniciante ante el Primer
grado iniciático dentro del Templo.
II.
Segunda
clase: Francmasonería: se corresponden, a la perfección.
5.
Aprendiz.
6.
Compañero.
7.
Maestro.
8.
Iluminado
Mayor. Se produce un salto cualitativo hacia el perfeccionamiento
filosófico. Recordemos que el nuevo hermano, cuando aún era un Profano, tuvo que pasar por un pre-grado
denominado como Iluminado menor.
Esa presunta Iluminación menor, no
era más que una Intuición propiciada
por el espíritu del postulante; pero ahora, ya, las tinieblas pasaron y la luz
se le hizo clara y el Iniciado ha
tenido acceso a los símbolos y rituales que la Fraternidad contiene en su Arcón
de la sabiduría desde tiempo inmemorial y su Espíritu ha recordado.
9. Iluminado dirigente. En el escocismo
masónico se sigue en el perfeccionamiento los conocimientos contenidos dentro
de la Masonería Filosófica o Roja.
III. Tercera clase: Misterios:
10. Sacerdote (Pequeños misterios) Vendría
a ser una especie de Sacerdocio de Aarón,
del Templo exotérico y se corresponde en la Obediencia
Rosacruz con el de Adeptus Major.
En el Rito Escocés Antiguo y Aceptado,
toma su máxima importancia en el Grado 18
de Soberano Príncipe Rosacruz o del Águila y del Pelícano, cuyas connotaciones de
tinte religioso y cristiano son un tanto evidentes e incuestionables.
11. Regente (Pequeños misterios) Llegados a
este punto, el Iniciado debería de
haberse transformado en un auténtico Adepto
con el mayor conocimiento del pensamiento filosófico y de los misterios
religiosos de la mayoría de las religiones existentes sobre la faz del
mundo.
12. Mago (Grandes misterios) Ahora el Sacerdote externo se ha convertido en un
Sacerdote Interno que puede hablar
con la divinidad y a modo de Moisés, poder mirar el rostro de Dios sin tener
que volverse loco o ciego. El Iniciado
ha conseguido entrar en los misterios de la Teúrgia o magia Divina que
trasciende cualquier tipo de magia inferior sea negra, blanca, roja o de
cualquier otro color.
13. Rey (Grandes misterios) No es otra cosa
que la natural prolongación del grado de Magus y que en el Rito
Rosacruz se corresponde con el propio de Magus y en el escocismo con el Supremo Grado Treinta y tres de Soberano Gran Inspector General.
Este Grado, a pesar de considerarse como el
último administrativo y de máximo Poder de liderazgo, representa fielmente al
Ser Humano, Hombre y Mujer, llegados al final del Camino Iniciático donde ha podido descubrir su Realeza Divina. El
Ser Humano, la Humanidad no es más que una parte de la Esencia del Gran
Arquitecto del Universo y por lo tanto el Hombre limpio y elevado por el
proceso iniciático se ha convertido, cual Jesucristo, en la mano derecha del
Creador.[6]
Los grados superiores se organizaban en Iglesias, Provincias
y Nacionales,
que correspondían al Supremo Consejo de Areopagitas –dicho nombre es la antigua
Suprema Corte ateniense-.
Uno de sus características fue el secretismo,
los rumores de sus actividades comenzaron a filtrarse, incluso cuando en 1782
se trató de controlar una rama de la masonería, el Rito
de la Estricta Observancia del barón Karl Gottjhel von Hund (1722-1776).
Entendamos el iluminismo,
como la entrada de la luz de la razón.
“Weishaupt estaba
realmente convencido de que la verdadera doctrina esotérica de Jesús consistía
en que ese estado original de “libertad e igualdad” podría ser recuperado
alguna vez a través de la “iluminación”. Por ello, al crear Weishaupt los
Illuminati, su verdadera intención era que cada colonia formara una nueva
‘escuela de sabiduría’”.[7]
Rito de la Estricta Observancia
Es un rito que manejaba siete grados, y se basaba en una
antigua sabiduría preservada por los templarios, secreto que fue revelado por
un círculo de superiores desconocidos.
Se incluían
prácticas de cábala, alquimia, donde los miembros aprenderían el secreto de
la Piedra Filosofal, por ende la inmortalidad.
Ejerció cierta influencia en la masonería al introducir
elementos ocultos y esotéricos en la masonería, y fue fuente de inspiración
de otros ritos como es el caso de la Orden
de la Rosacruz de Oro.
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